Imagen tomada de Internet.
DE CORAZÓN Y CIENTÍFICAMENTE os
diré de antemano que la probabilidad de éxito es baja. Aunque por intentarlo
que no quede.
Repasemos juntos: un matraz, un
cuentagotas, dos tubos de ensayo, tres buretas, un hornillo, un mechero. Harina,
canela en rama, tres culebras. No faltan los dos sacos de sal ni los cinco
mechones de cabello.
Perfecto el calculo del peso
necesario en agua: cuarenta kilos.
Mmmm qué más, qué más. Una
brújula orientada al norte, el cronómetro marcando una hora para su marcha
atrás.
Todo listo.
Salgamos de la sala y regresemos
luego a comprobar el resultado.
¿La mujer perfecta habla?
Algo atrevido el microrrelato. Supongo que vertiendo humor con ese sigilo microrrelatero, te expones más de lo que tocaría.
ResponderEliminarValiente apuesta cuando menos.
Una perta.
David, es difícil que en un laboratorio se puede crear a alguien perfecto, pues ahí fuera en el exterior loa peligros son diferentes. La mujer perfecta al igual que el hombre perfecto no existe, y si existiera, no querría verlo. Qué aburrido.
ResponderEliminarUn abrazo.
Bueno, bueno... atrevido experimento para el ReC. Si habla o no habla, sólo será cuestión de las proporciones y las medidas empleadas. Yo creo que como dice Cortacuentos: ¡es atrevido! ¡desde luego!.
ResponderEliminarUn abrazo.
Jajaja, mi cuñada habla por los codos y para mi hermano es perfecta. O eso dice. Ahora, tengo un vecino que habla tres veces más que mi cuñada, y te aseguro que perfecto no es, bueno sí, es un perfecto impresentable... Así que...
ResponderEliminarFue un buen intento, David, di que sí.
Abrazos,
La última frase me ha producido una sonrisa que todavía dura...así que, ese experimento no sé, pero el del microrrelato ha funcionado porque me ha cambiado la cara.
ResponderEliminarSaludos.
Un final con humor aunque sea a base de tópicos. Gracioso. Saludos
ResponderEliminarPor intentarlo que no quede, como dice tu narrador-científico. Un texto divertido y con posibilidades.
ResponderEliminarAbrazos
Coincido con los que apunta que has hecho una apuesta atrevida para el concurso, pero diré que -sobre todo- me he divertido leyendo e imaginando.
ResponderEliminarSi la cuñadad de Miguelángel es la mujer perfecta, es una prueba más de que ya está todo inventado. :-)
Un abrazo,
Será atrevido, no lo sé, pero no tengo ni idea de cómo afrontar este reto ante REC. Así que lo intento de todas las maneras infructuosamente. Sigo intentando ser uno de los elegidos semanales pero debe ser que hay demasiada calidad para mí.
ResponderEliminarUn saludo indio
Mitakuye oyasin
Entre tantos micros no debe ser fácil ser uno de los tres elegidos cada semana. En mi opinión, en tu caso, no es cuestión de calidad, que ya tienes sobradamente demostrada, y en general la elección no deja de ser un caprichoso azar, aún teniendo en cuenta la calificación de quienes seleccionan.
ResponderEliminarSuerte para próximos intentos.
Un saludo.