Hace unos meses que inicié un
experimento siguiendo el modelo del “bookcrossing”.
Libero nanolibrillos, unos 25, con 5 microrrelatos de mi autoría, por
diferentes sitios, bibliotecas, transporte urbano, museos, plazas…
Hasta la fecha ni con la primera entrega ni
con la segunda ha habido éxito en cuanto a respuestas. Espero al menos que hayan
servido para entretener el trayecto de autobús de un estudiante, la espera en
el médico a una embarazada, unos minutos de un lunes a un parado en un banco de
la plaza sentado sin más que hacer, a una pareja de enamorados que entre beso y
beso descansan leyendo uno de los microrrelatos presentes...
Soñar es gratis.
Como dicen que quien la
persigue la consigue, ahí va mi tercera edición: microSeñales de Humo Viajeras 3.
Un saludo indio
Mitakuye oyasin

Estoy convencido de que acabarás encontrando alguien que supere a la pereza y se siente a contarte su experiencia, David.
ResponderEliminarUn abrazo.
O sea que ...la gente se los llevaba y no entraba al blog... ¡pues qué sosos!. Pero ¿dónde estás lanzando estas microseñales? ¿no te habrás ido a la luna, que me dijeron que no había nadie?....
ResponderEliminarSuerte en el tercer intento. Estoy segura de que ahora va la vencida.
Original proyecto el tuyo. Yo hace cuatro o cinco años, cuando escribía con bastante menos asiduidad, consideré la posibilidad de hacer lo mismo pero con microrrelatos sueltos escondidos dentro de los plastiquitos para guardar carretes. Al final me dio pereza.
ResponderEliminarÁnimo.
Una perta.
David, hay gente que no sabe valorar lo que se encuentra, o que es retraída a la hora de agradecer el gesto. Espero que en esta ocasión tengas más suerte, pues la idea me parece muy atractiva.
ResponderEliminarYo he bromeado más de una vez con repartir microrrelatos en los semáforos o en una manifestación como hacen muchos que portan siglas.
Un abrazo fuerte.
Atractiva propuesta. A esperar que la suerte me acerque uno de los nanolibrillos. Saludos
ResponderEliminarEspero que algún anónimo lector sepa valorar lo que cae en sus manos cuando encuentre uno de tus nanolibrillos: "... hojas desprendidas del árbol del corazón...", que diría Espronceda.
ResponderEliminarÁnimo. Un saludo
Lagartojuancho8
David, paciencia, ya verás como al final alguno llega. Abrazos.
ResponderEliminarAl final alguno se animara ¿no? Es cuestión de paciencia.
ResponderEliminarBesitos
El proyecto me parece maravilloso. Espero que la suerte acabe llegándote en forma de respuesta.
ResponderEliminar