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sábado, 27 de septiembre de 2014

Hoka hey! ¡Habemus ganador!

Hoy es un buen día para conocer el microrrelato ganador de este Concurso de microSeñales y por supuesto a su autora.
Pero antes de nada quiero agradecer el interés mostrado a cada uno de los 41 participantes y a otros que o bien no han llegado a tiempo o las musas no les visitaron pero siguieron atentos el desarrollo de este concurso. Por mí parte me quedo muy satisfecho, me ha entretenido mucho y también he aprendido de cada relato. Gracias de verdad.
Imagen tomada de la Red

Y ahora sí voy allá. En una reñidísima votación (el envío de las puntuaciones del último participante en la última hora del plazo decantó los resultados...), el microrrelato número 9, procedente del sur de España, de Huelva, de una autora que confiesa que todavía no ha recibido ningún premio y que pinta acuarelas... será quien se lleve el máximo galardón. ¡¡¡ENHORABUENA!!!

9- MUJER DE AGUA (Reyes Alejano Monge)
web: http://adondelcaminoira.blogspot.com.es/

Mi abuela era Naskapi. Mi madre era Naskapi. Yo soy Naskapi. Mi abuela era una mujer de agua. Su vida transcurrió ligada al río Mattawa, que se reflejaba en sus ojos con un insólito brillo. Cocinaba en su orilla, navegaba por él  y  amaba  las grandes tortugas que chapoteaban en los atardeceres arrebatados. Nos pidió, un poco antes de morir, que lanzáramos sus cenizas a las aguas; solo así podría descansar por siempre. A menudo también yo me dejo acunar  por nuestro río. Leo en su orilla a la luz de sus tardes encendidas, y disfruto del chapoteo de las tortugas; una de ellas con un insólito brillo en sus ojos arrugados.



Imagen tomada de la Red 


En breve me pondré en contacto con Reyes para enviarle un ejemplar de mi libro de microrrelatos microSeñales de Humo.

Y para cerrar este concurso tan sólo me queda compartir con todos la publicación de un archivo pdf que incluye los micros participantes y alguna cosica más. Lo he titulado, espero que os guste, Un Carcaj de microrrelatos. Para descargarlo clic aquí.



Un saludo indio
Mitakuye oyasin



viernes, 26 de septiembre de 2014

Segundo puesto

Nos acercamos al momento decisivo del concurso pero antes hemos de conocer el microrrelato que habéis elegido entre todos para ocupar la medalla de plata, el segundo puesto. Enhorabuena a su autora.


Imagen tomada de la red

2- INTERCAMBIO (Esperanza Temprano Posada)
Blog:  Quisiera contarte. 
http://elrastrodelapalabra.blogspot.com.es/

Me he apuntado a un programa de intercambio cultural y desde Minnesota ha venido a vivir conmigo un sioux. Mi apartamento no da para más y se ha instalado en el baño, ha vaciado todos los tiestos y ha extendido la tierra por el suelo, allí duerme. También ha abierto la jaula del canario y lo ha echado a volar por la ventana. Desde que está conmigo, me resulta difícil sentarme ante el televisor a ver una película de indios y americanos, porque me dirige profundas miradas de reproche y se me acaban atragantando las palomitas. Cuando hay luna llena sale a cantarle y danzarle al jardín, y se ha convertido en el centro de atención del vecindario, hasta tal punto que, desde la semana pasada, se forman colas de gente en la calle que terminan en mi apartamento, al principio venían a hacerse una foto con él, pero han descubierto que es un hombre sabio y ahora vienen a consultarle sobre sus problemas. 
Dentro de una semana me iré con él a Shakopee, no sé lo que pasará cuando descubra que no tengo nada que enseñarle.    

jueves, 25 de septiembre de 2014

Tercer puesto

Hoy hago público los 2 microrrelatos que han empatado en el tercer puesto del Concurso de microSeñales tras la votación que habéis realizado los propios participantes. A ellos mi enhorabuena.

Imagen tomada de la Red


39- DESAPRENDIENDO A VOLAR (Miguel Jiménez Salvador)
Blog: El perro que no ladra
http://arktos-themis.blogspot.com.es/

Engreído, confundo montañas con edificios, piedra por hormigón. Los árboles son postes luminosos que deslumbran, en lugar de dar sombra, y antenas de televisión. Las praderas son un manto negro que se derrite bajo mis zapatos italianos y llevo, no sé cuántas lunas, sin ver un horizonte. Mis plumas son un reloj calculadora y la sombra de mi espíritu guía, una conexión a internet.
Deambulo cuando antes galopaba, el final de una estirpe de rastreadores, incapaz de encontrar el camino de vuelta a casa.


19- SUEÑO (Pau Pescador)

Cuando se acaba el día en la reserva recoge la basura que los turistas han ido tirando por todas partes.
La pone junto a unos leños y enciende el fuego, esta vez de verdad.
Espera a que el humo se haga cada vez más espeso y luego con una manta empieza a dibujar en el cielo; el atardecer rojizo despierta su inspiración: caballos, flores y algún rostro femenino. Poco a poco se apaga el día y la brasa. Solo así logra dormirse.

miércoles, 24 de septiembre de 2014

¡Campana y se acabó!

El concurso, casi. Las votaciones, anoche a las 24 horas.
Y puedo decir que tras hacer recuento de todos los votos HABEMUS VENCEDOR, lo haré público este sábado.

Imagen tomada de la Red

Antes informo que han sido unas puntuaciones muy reñidas, todo muy ajustado. Hay 8 microrrelatos con 0 puntos, 25 entre 1 y 10 y 8 con 11 o más puntos.
También que hasta las últimas horas del plazo para enviar las puntuaciones estaba todo por decidir, la expectación en mí se mantuvo hasta el filo de su finalización.

Agradezco de nuevo a los 41 participantes el interés y esfuerzo invertido, sin vosotros no hubiera sido posible.

Mañana haré público los dos microrrelatos que han empatado en el tercer lugar. El viernes haré lo propio con el que ha quedado en segundo lugar. Y el sábado será el día de conocer el vencedor. Este mismo sábado si no hay imprevistos publicaré también el archivo pdf público y gratuito con todos los micros participantes.

Mientras tanto os dejo con una microSeñal mía:

AGUA QUE FLUYE
Hakadad crecía buscando su destino. No era un hábil cazador ni valiente guerrero como se esperaba de él. Tampoco un locuaz orador. En los últimos tiempos se le veía deambular por la pradera con la cara muy triste.
Sucedió entonces que un tiempo de sequía se prolongaba demasiado ya sobre su gente y Hakadad sin consultar con nadie, movido por la fuerza del Gran Espíritu, ascendió a lo alto de la montaña, con un arco y flechas en la mano y escudo al brazo y comenzó a hablar a las nubes que hacía tanto no veía, pidiéndoles lluvia de manera tímida al principio, desesperada al cabo de unas horas e incluso derramando lágrimas finalmente.
Cuentan en su tribu que nunca más volvieron a saber de él, pero que a los dos días de su desaparición, un riachuelo brotó de la montaña. 

viernes, 19 de septiembre de 2014

Del concurso y del MA15

A falta de 4 días para el fin de las votaciones del Concurso de microSeñales, puedo adelantar que está muy reñido. Hay cuatro o cinco microrrelatos que parecen disputarse la victoria. Uñas, pocas me quedan ya cada vez que recibo un correo con las puntuaciones de cada participante.

Esto se acerca al final....

Mientras este final llega os cuento también que una microSeñal mía, Negación de la realidad, ha sido incluida en el número 15 del Manifiesto Azul, fanzine que publica el Colectivo Iletrados. Lo podéis leer en la página 30 de 64.


domingo, 14 de septiembre de 2014

A la espera

A partir de mañana comenzarán las votaciones del Concurso de microSeñales, hasta el día 23, margen amplio para que todos los participantes tengan tiempo de sobra en emitir sus puntuaciones. Ya tengo ganas de saber quién saldrá victorioso.

Mientras ese día llega, sigo añadiendo entradas con las que poco a poco retomaré la "normalidad" de este blog.



Y así, mis microSeñales se oyen desde Rosario, Argentina. El programa de radio nº 9 de Letras en audio de Jone Miren Asteinza Royo dedicado a "La Vejez" emitió el pasado 3 de septiembre mi micro "Fotogramas" (13´07´´) que además está incluido en el Audiolibro que elaboró Pablo Gonz, "Viejos amigos". 
Entre otros estoy acompañado de Susana Camps Perarnau, Miguel Ángel Molina, Elena Casero, Javier Ximens, Mar Glez. Mena, Iván Teruel Cáceres...




Por otra parte mi última participación en Los Viernes Creativos de Fernando Vicente es "AGONÍA MAR ADENTRO". Cada viernes nos propone una foto a partir de la cual desarrollar un micro.



AGONÍA MAR ADENTRO
Una sirena de un marinero se enamoró. Éste naufragó, y quedó atrapado en el camarote del barco sin poderle expresar sus sentimientos. Desde entonces, la sirena le visita cada noche. Le canta, le acaricia hasta el amanecer. Los huesos, endebles por la humedad. El corazón, aún vigoroso, late con fuerza y se resiste a morir.


Y esto es todo, de momento.
Un saludo indio
Mitakuye oyasin


martes, 9 de septiembre de 2014

Información del Concurso recién finalizado.

Tras finalizar el plazo de 2 meses para participar en el Concurso de microSeñales hago balance y el resultado del mismo es muy satisfactorio sobre todo teniendo en cuenta que el tema estaba restringido a los nativos norteamericanos y comprendía los meses de verano cuando todo parece que funciona a medio gas.
Han sido 41 microrrelatos presentados de 41 valientes que se han atrevido a afilar sus flechas. Gracias a ellos una vez más.
La procedencia de los textos se ha repartido por toda la geografía de España siendo Madrid con 9, Barcelona con 5 y Valencia con 3 los lugares que mayor interés han demostrado, incluso han llegado 2 desde Colombia, 1 desde República Dominicana y 1 desde Alemania (validos para el concurso adjuntando una dirección postal en España).


La suma de palabras total sin contar títulos asciende a 7577.
El microrrelato de menor extensión consta de 27 palabras, el nº 29 Compinches de María Rojas y hay tres con el máximo de 250, el nº 26 Volver de Javier Palanca, el nº 30 Apala de Virtudes Torres y el nº 41 Jerónimo de Pablo Vázquez Pérez.
21 micros se sitúan en la franja entre 200-250 palabras, supone el 51% del total y sólo 2 lo hacen en la franja entre 0-50 palabras, menos del 5% del total.
Respecto al sexo, 27 proceden de varones, un 66% y 14 de mujeres, un 34%.
Apaches, Arapajoes, Cheyennes, Sioux-lakotas, Cheroquees, Naskapis, Shawnees, Powhatans, Pequots, Narraganset, Choctaws, Navajos, Haidas… Quanah Parker, Toro Sentado, Black Kettle, Tecumseh, Tenskwata, Caballo Loco, Jerónimo… Danza del sol, danza de la lluvia, hacha de guerra, pipa de la paz, calumet, atrapasueños, cabelleras, exploradores indios, chamanes… Caballos, búfalos, coyotes, tortugas, osos… Sand Creek… un poco de todo.


A estas alturas sólo falta saber de entre todos los destinos dónde irá a parar el ejemplar de microSeñales de Humo.


Entre el 15 y 23 de este mes se realizarán las votaciones. En busca de la mayor objetividad posible pensé que lo más justo sería que fuerais los propios participantes, con vuestros votos, quienes decidierais el ganador. Y aunque ya es tarde, si lo volviera a organizar añadiría los micros de manera anónima, para que fuera todo el proceso más objetivo todavía. Aún así confío en que las votaciones se harán valorando la calidad de los textos y no en función de si se conoce más o menos al autor.
Una vez contabilizados los votos, haré público el ganador durante el último fin de semana de este mes.

Un saludo indio

Mitakuye oyasin

viernes, 5 de septiembre de 2014

¡SE ACABÓ!

Justo a medianoche ha terminado el plazo para participar en este Concurso de microrrelatos. Han sido 2 meses de plazo para enviar propuestas. 41 las recibidas. De entre ellas, 1 será la ganadora.
De momento no añadiré mucho más, tan sólo quiero DAR LAS GRACIAS a cada uno de los 41 valientes participantes que se han atrevido con esta iniciativa, tema quizá complicado, restringido y desarrollado en el periodo estival, tiempo de relajación de neuronas. Para cada uno de ellos recaigan los buenos espíritus.
Y después de la guerra, a la espera de las votaciones, toca una ronda de la pipa de la paz.

Imagen tomada de la Red

En breve habrá noticias.

Un saludo indio
Mitakuye oyasin

jueves, 4 de septiembre de 2014

41- JERÓNIMO (Pablo Vázquez Pérez)

Imagen tomada de la Red

Nadie en la residencia ha querido trasladarse aquí, ni siquiera los recién llegados. Mejor para mí. Prefiero estar solo en esta habitación que compartirla con otro que no sea Jero.
Nos sorprendió que tuviera más de noventa años, cuando ingresó aquí tras recorrer en soledad los cinco kilómetros que nos separan de la ciudad, calzado con unos mocasines de tela y sin apenas equipaje.
Varios compañeros le llamaban “el indio” y él sonreía. Incluso les corregía contando que provenía de una tribu cercana a México por herencia del abuelo y otros antepasados. El sobrenombre en comanche no lo recuerdo, pero sí que significaba algo así como Halcón Niebla. A mí no me importaban esas historias porque nunca me gustaron las películas de vaqueros, pero cada vez que Jerónimo hablaba, todos los presentes atendíamos igual que si escuchásemos una voz sabia y cálida como la de nuestros padres.
Y así estuvimos hasta el último día, oyendo desde el suelo cómo crecían los árboles y otros arbustos del jardín. Palpando los rayos de sol que se filtraban por las ventanas. Saboreando el rocío dulce de las rosas en el otoño. También nos enseñó a usar nuestros cuerpos viejos como arcos, tensos o flexibles según la situación.
Y así hasta el día en que partió, mientras volaba un halcón por el cielo, apenas visible entre un espeso manto de niebla.
Después de todos estos meses debería echarlo de menos, pero es imposible porque su presencia vibra todavía entre las paredes de esta habitación.

40- EL LEGADO (Juancho Plaza)

Imagen tomada de la Red

Desde que su brazo diestro descansa al lado de las cenizas de sus antepasados, Búho Sigiloso ha sido apartado del grupo de los guerreros. Las mujeres le miran con recelo y está harto de soportar el desprecio de los viejos y las burlas de los niños. Cansado de las miradas de compasión de sus padres y del aire de superioridad de su hermano, busca refugio en el viejo hechicero. A pesar de los golpes que recibe se pega a él como un perro hambriento y le sirve como un lacayo. A cambio observa cada uno de sus movimientos, aprende sus métodos y memoriza sus brebajes. Cuando el chamán descansa en su tipi o se re retira a yacer con alguna de sus concubinas, Búho Sigiloso se atavía con sus antiguas armas, se pone pinturas de guerra y, a pesar de tenerlo prohibido, se adorna con el tocado de las dos plumas de águila ganadas con honor. Así engalanado se sienta frente al tótem de la tribu y observa durante horas sus grabados. A través de su miembro perdido se siente en contacto con los espíritus que le revelan secretos a los que solo él puede acceder. Ahora ha pedido a su maestro que le deje cerrar los ojos a los muertos, para eso basta con tener una mano, y en sus cuencas es capaz de leer el futuro más próximo y que pronto, también él, podrá disfrutar de sus concubinas.

39- DESAPRENDIENDO A VOLAR (Miguel Jiménez Salvador)


Imagen tomada de la Red


Engreído, confundo montañas con edificios, piedra por hormigón. Los árboles son postes luminosos que deslumbran, en lugar de dar sombra, y antenas de televisión. Las praderas son un manto negro que se derrite bajo mis zapatos italianos y llevo, no sé cuántas lunas, sin ver un horizonte. Mis plumas son un reloj calculadora y la sombra de mi espíritu guía, una conexión a internet.
Deambulo cuando antes galopaba, el final de una estirpe de rastreadores, incapaz de encontrar el camino de vuelta a casa.

38- EL ESPEJO (Izaskun Albéniz)

Imagen tomada de la Red

Envuelto en un asombroso ropaje y provisto de una aparente sonrisa cordial, aquel desconocido le invitó a pasar dentro de la extraña construcción en que vivía, tan diferente de los tipis de su tribu. Allí, sobre una superficie de madera, Halcón Errante destapó con manos temblorosas sus presentes para agradar al hombre blanco, quien, al aceptarlos, pareció satisfecho mientras le correspondía ofreciéndole un extraño objeto con mucha ceremonia. Por cortesía y con no poca curiosidad, Halcón Errante siguió las instrucciones que le daban pese a que al tomarlo entre sus manos había sentido un escalofrío. Así, lo acercó lentamente hacia su cara y descubrió espantado que los ojos de su difunto hermano Oso Mayor, le miraban aterrorizados desde aquel círculo mágico. El aplomo y la valentía se esfumaron en un instante. Halcón Errante se transformó. Ya no era el guerrero valeroso que aquel amanecer había abandonado la tribu, sino un muchacho asustado que, entre aullidos de pavor, escapaba a toda prisa de la temible magia del hombre blanco mientras en el suelo, los fragmentos estrellados del espejo, auguraban entre sombras el futuro aciago del clan.

¡Hasta las 24 horas de hoy!

El plazo para participar en el Concurso de microSeñales de Humo que comenzó el 4 de julio está a punto de finalizar, concretamente lo hace a las 24 horas de hoy. 
Bases aquí



Si no has enviado tu propuesta, ya no esperes nada, abre el correo, añade el microrrelato y tus datos y envíalo a nocomments23@gmail.com con el asunto: Concurso de microSeñales.

¡Hoka hey!

miércoles, 3 de septiembre de 2014

37- POR LOS PELOS (Tíndaro del Val alias Radon)

Imagen tomada de la Red

Arrastraron al sheriff hasta el centro del poblado, lo ataron con cuerdas al tótem y encendieron una hoguera. A continuación formaron un círculo alrededor del prisionero y empezaron con los cánticos y las danzas rituales previas al sacrificio. A pesar de no tener salida, el viejo vaquero reía sin parar, como un espectador que contempla cómodamente desde su butaca su comedia teatral preferida. Hasta que vio a uno de los sioux, un tipo de mediana edad con el que apenas se había cruzado, acercándose hacia él con un enorme cuchillo en la mano. Entonces su mirada se inundó de miedo, y un grito se ahogó en su garganta al sentir las primeras gotas de sangre resbalando por su rostro, cada vez más pálido. Aquello no debía terminar así. No era ese el plan.
Mientras sus enfurecidos empleados indios le cortaban la cabellera, el director general no paraba de gritar que la dinámica de grupo había terminado.

36- MEMORIAS DE LA PRADERA (Ignacio J. Borraz)

Imagen tomada de la Red

Estoy colgada. Cada día que pasa la gente me mira más escrupulosamente como si fuera un bicho raro, una simple reliquia oxidada que sueña con tiempos mejores. Bueno, tal vez sí sea eso último, tal vez sí me pase el día soñando con el pasado. Memorias de batallas encarnizadas: siempre afilada, rápida, mortal. Pero también estampas que esos que me miran con recelo nunca podrán imaginar: el agua helada del río sobre mi piel desnuda y lisa; los brincos y tirabuzones entre las ramas del bosque con la savia de árboles milenarios bendiciendo mi cuerpo; el abrazo firme de la mano amiga, sus arrugas y las mías curtidas en una misma vida ajetreada.
Estoy colgada de la pared y el guía del museo solo se acerca para contar historias truculentas de cabelleras y sangre pero yo soy mucho más; yo todavía conservo las memorias de la pradera.

35- NUNCA HE FUMADO (Mar González Mena)

Imagen tomada de la Red

Todo comenzó por un concurso. Había que escribir sobre nativos norteamericanos y, claro, visitar su tierra para inspirarnos era lo más apropiado.

Nunca he fumado, pero en aquel Pontiac destartalado era el único que no lo hacía. Así buscamos a Toro sentado, Nube blanca o Flecha veloz. Cada vez que nos cruzábamos con alguien lo imaginábamos descendiente de un largo linaje de sangre india y a cada cual le inventábamos una historia que siempre acababa fumando la pipa de la paz. 

Nunca he fumado, pero confieso sin falsas humildades que mis descripciones de este ritual eran las mejores. Empezamos por escenas de aquellas películas de los años 50 pero poco a poco nos dejamos llevar. En varias versiones aparecían extraterrestres, una vez Marilyn le puso ojitos al jefe de la tribu y las tropas del general Custer se convirtieron en dinosaurios que lo arrasaron todo. 

Nunca he fumado, pero no recuerdo el final del viaje. Solo despertar en el salón de aquel piso de estudiantes rodeado de mis amigos. Sobre la mesa ceniceros llenos, latas vacías y guías de esos viajes que no nos podíamos permitir salvo ganando algún concurso millonario de los que buscábamos en Internet. 

martes, 2 de septiembre de 2014

34- EL TRATO (David Gambero)

Imagen tomada de la Red

No fuimos los primeros, pero creíamos que seríamos los últimos en morar esta tierra. En honrarla como el regalo de los dioses que es. Pero ahora estoy seguro que hemos empezado a vivir un tiempo prestado. Desde que vimos el primer carromato extranjero levantar un polvo que llevaba decenios aposentado no me quedó ninguna duda. No debimos haberles acogido. Enseñado nuestras costumbres y forma de vida. No. Debimos haber sido como ellos. Altivos. Egoístas. Traicioneros. Pero no sabíamos serlo. No en aquel entonces. Solo sabíamos ser nosotros mismos.

Pero ahora ya no somos nada. Meros pedazos de una tierra desgajada. Conquistada a sangre y fuego. Tomada por el estruendo de esos artilugios que el hombre pálido llama rifle. Nosotros lo llamamos el llanto del búfalo primero. Perdición después. Y ahora lo llamamos esperanza. Una vana que nos permita retomar lo que una vez fue nuestro.

Por eso estoy esperando a un traidor entre los suyos, cargado de piedras de fuego en mi bolsa y odio en mi corazón. Cuando me entregue los rifles podremos ir a matar a los suyos. 

Ahí viene. Le cuelga una sonrisa y un saco pesado en la otra mano. Me lo arroja a los pies mientras toma eso que llama “oro” y se marcha sin mediar palabra. No las necesito. Sólo los rifles. Espera, ¿Qué es esto? ¿Ha dejado mantas también? No las rechazaré. El invierno es tan frío como la soledad. Y ambos han caído sobre nosotros. Sólo esperamos no caer nosotros también.

33- EL REGRESO DEL GUERRERO (Nicolás Jarque Alegre)

Imagen tomada de la Red

Hace horas que cabalga, desorientado, bajo un sol abrasador. Escucha el sonido insistente de tambores. Sortea búfalos, coyotes, caballos desbocados. Divisa su bosque, el río, los osos. Revive escenas de niñez, de iniciación, de caza. Se encuentra con otros apaches. Recibe el aliento de sus antepasados… Y ya no respira.

lunes, 1 de septiembre de 2014

RECTA FINAL

Quedan 4 días para participar en el Concurso de microSeñales. 32 valientes guerreros han desenterrado el hacha de guerra. ¿Y tú? ¿Sigues apurando para dar el coup, toque final?
Si aún tienes dudas las bases aquí.



Cada vez quedan menos huecos libres en el mapa. Desde Norte, Sur, Este y Oeste, a Península e Islas, se ven microSeñales. De ellas una será la ganadora. ¿La tuya?
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